Conoce los signos del zodíaco de tierra

signos del zodíaco de tierra

En el zodiaco, conviven e interactúan 12 signos zodiacales, ordenados según los fundamentos y preceptos de los cuatro elementos que se determinan dentro de la visión clásica de la astrología: el agua, el fuego, el aire y la tierra. Es de destacar, que cada elementos configura respectivamente, cuatro sub-sistemas compuestos por tres signos zodiacales en cada uno de ellos. Otorgándoles, un conjunto de características y una manera común de ver el mundo. Por tanto, conozcamos a los signos del zodíaco de tierra.

Características comunes de los signos del zodíaco de tierra

Toda nuestra energía vital, se manifiesta de distintas maneras a través de los elementos astrales. Dichos elementos determinan además, hasta la forma de cómo nos relacionamos con nuestro entorno. En este caso, el elemento tierra a diferencia del resto de los elementos, simboliza la forma de cómo percibimos por medio de los sentidos: el gusto, el tacto, olfato y la vista. Por tanto, los signos que la constituyen conocen al mundo a través de éstos.

Es de destacar, que dichos signos de tierra, poseen un carácter pasivo y temperamento frío; se caracterizan además, por ser los signos más resistentes del zodiaco. Son muy perseverantes y trabajadores por naturaleza, y siempre tienden a esforzarse al límite en todos los proyectos y/o actividades que llevan a cabo. Son seres pacientes y tolerantes a la vez que muy testarudos y formales. Su fuerza de voluntad es admirada por todos.

Signos de tierra: Tauro, Virgo y Capricornio

Tauro (Del 21 de abril al 21 de mayo)

Cada signo de esta triada terrenal, visualiza y deja fluir su energía de distinta forma y grado. En el caso de Tauro, los nativos de este signo zodiacal se caracterizan por ser los más genuinos exponentes del elemento tierra. Son personas tozudas y tercas, así como ambicionas pero muy laboriosas y trabajadoras. Son además seres muy reflexivos que buscan la seguridad ante todo y piensan y analizan todas las alternativas para tomar una decisión.

Los Tauro, son amantes fieles y dedicados a su pareja, son seres apasionados y cariñosos, y cuya naturaleza terrenal los hace asumir la tendencia de regirse y ser gobernado por los sentidos, a tal extremo de llegar a necesitar siempre el contacto físico para poder sentir a su pareja. Poseen además, un alto sentido de la justeza, que los hace intolerantes a las desigualdades entre la pareja.

Virgo (Del  24 de agosto al 23 de septiembre)

Sus rasgos más comunes y característicos lo constituyen su carácter racional y su gran sabiduría. Y es que Virgo, como genuino signo perteneciente al elemento tierra, se rige por su sentido común y su gran racionalidad, más que por sus emociones y sus sentimientos. Por tanto, son personas muy serias y reservadas, con gran sentido de la disciplina, cordiales y ordenadas, con gran sentido de la responsabilidad y excelentes consejeras.

En materia amorosa, Virgo no desnuda su corazón con facilidad u ante cualquier persona. Los nativos de este signo zodiacal, requieren sentir total seguridad para demostrar su afecto y sus sentimientos. Al igual que Tauro, Virgo son amantes leales y muy fieles. Son además, personas muy detallistas y sinceros con su pareja y les fascina sentir que son especiales para ésta. Aunque odian sentirse agobiados.

Capricornio (Del 22 de diciembre al 20 de enero)

De todos los signos de tierra, los nativos de Capricornio representan al signo más estable y sereno. Son personas perseverantes y trabajadoras que nunca huyen el afrontar un reto, y por tanto siempre sienten la necesidad de trazarse objetivos y metas, y cumplirlos para alcanzar su auto realización. Por tanto, se caracterizan por ser excelentes profesionales, donde obtienen los mayores logros y reconocimientos.

En cuestiones amorosas son desconfiados y muy herméticos, a tal punto que llegan a tener pocas parejas, ya que se les dificulta confiar en las personas que le rodean. Por tanto, les cuesta mucho conseguir a su media naranja. Sin embargo, al hallarla le ofrecen gran estabilidad y seguridad emocional, esperando de su pareja una actitud recíproca.